La ciudad de Dubai, situada en los Emiratos Árabes Unidos, entre el 30 de noviembre y el 12 de diciembre pasados acogió la vigésimo octava Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
En la COP28 los Estados realizaron un análisis exhaustivo de los avances realizados desde la firma del Acuerdo de París (2015) sobre el cumplimiento de los 3 objetivos relacionados con la emergencia climática:
- Acciones de limitación del calentamiento.
- Medidas de protección frente a daños y adaptación al cambio climático.
- Cooperación entre Estados.
El Acuerdo de París recoge el compromiso de hacer un balance global cada cinco años, un proceso que debe servir para que los Estados intensifiquen sus compromisos y definan una hoja de ruta más adecuada.
Los principales acuerdos del balance global recogidos en la COP28 han sido los siguientes:
- Las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero deben reducirse un 43% para el año 2030, respecto a 2019, para limitar el calentamiento global a 1,5 ºC.
- Acelerar los esfuerzos para la eliminación progresiva de la energía del carbón e impulsar de una manera justa, ordenada y equitativa la transición hacia la eliminación de combustibles fósiles en los sistemas energéticos, con los países desarrollados a la cabeza.
- Triplicar la capacidad de las energías renovables y duplicar las mejoras de eficiencia energética para el año 2030.
- Ayudar a los países a reforzar su resiliencia ante el cambio climático.
- Aumentar la financiación para el clima.
- Capacitar a todas las partes interesadas para que participen en la acción por el clima; en particular, a través del Plan de Acción sobre la Acción de Empoderamiento Climático y del Plan de Acción de Género.
Por otro lado, según numerosos agentes sociales “el gran objetivo de poner fin a los combustibles fósiles queda recogido en el texto final de la COP28, pero nuevamente con una redacción confusa que no establece con la claridad necesaria un fin de los combustibles fósiles diferenciado y alineado con las indicaciones científicas.
A pesar de que aparece por primera vez en un texto de la COP, la necesidad de alejarse de todos los combustibles fósiles, de los subsidios a las industrias contaminantes o de reducir las emisiones a la mitad en 2030, este acuerdo está muy lejos de la urgencia actual y de ser capaz de limitar el incremento de la temperatura global en 1,5 ºC”.
Así, los ecologistas rechazan la inclusión en el texto de la energía nuclear, la captura de carbono y otras falsas soluciones, al tiempo que afirman que, sin un cambio radical del sistema capitalista dependiente de los fósiles, será imposible alcanzar la justicia climática.
Finalmente, añadir que el Ayuntamiento de Errenteria tiene en marcha el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible (PACES) 2020-2030, y trabaja en la reducción del consumo energético y las emisiones de gases de efecto invernadero resultantes, en la transición a las energías renovables y en la adaptación a los impactos del cambio climático.